5 maneras de usar el poder de tu voz y de tu cuerpo para demostrar confianza (incluso cuando no la sientas)
Cuando te falta confianza, las reuniones de trabajo pueden ser algunos de los momentos más desalentadores del día. ¿Dónde pararse, cómo actuar, con quién hablar? Si estás ocupado pensando si perteneces en ese lugar o no, es difícil concentrarse en demostrar tu habilidad y experiencia – las razones por las que fuiste invitado a participar de la reunión en primer lugar.
Si deseas comenzar a destacar como un líder confiado en el momento en que ingresas a una de esas intimidantes salas de reunión, sigue estas recomendaciones para cada oportunidad. Al practicar en tus reuniones de menor importancia, también te asegurarás de exudar confianza en las de nivel superior.
Acá te damos 5 consejos de lo que debes hacer y lo que deberías evitar:
SÍ: Siéntate frente a la sala o en la cabecera de la mesa.
Tomar una posición directamente en medio de la acción indica que realmente te importa lo que está pasando y lo que se dice, que quieres aportar y ser escuchado. Incluso el acto físico de ir al frente de la sala tiene un fuerte efecto en las impresiones que los demás tienen de ti, ya sea que sean plenamente conscientes de ello o no. Situarse al frente significa que estás dispuesto y listo para liderar.
EVITA: Sentarte lejos del área de discusión.
Elegir un asiento al margen te deja exactamente así: fuera del círculo de influencia. Las personas, tanto consciente como inconscientemente, consideran las sillas a lo largo de las paredes y la parte trasera de la sala como posiciones de observación, para la galería y no para las personas que están allí para contribuir. No te agrupes con los practicantes, asistentes o auditores que solo están ahí para escuchar. Tú perteneces allí, así que toma un lugar que refleje eso.
SÍ: Trata a los ejecutivos importantes como iguales.
A menos que se trate de una asamblea o de una conferencia informativa unidireccional, estás en esta reunión por una razón: para contribuir. Habla, haz contacto visual y aporta comentarios de valor. Participa en la conversación con tus superiores, ya sea haciendo preguntas, ofreciendo ideas o compartiendo conocimientos contextuales y experiencia sobre el tema en cuestión.
EVITA: Bajar la mirada y no hacer contacto visual.
No mirar a los demás a los ojos puede parecer deferencia o respeto, pero los líderes quieren saber que estás escuchando, comprometido y listo para dar un paso adelante cuando tengas algo que agregar. Si quieres ser visto como una estrella en ascenso preparada para el liderazgo, opta por un compromiso total – escuchar, hablar, usar lenguaje corporal y contacto visual.
SÍ: Proyectar tu voz.
Habla con confianza y claridad cuando sea tu turno de agregar algo a la conversación. Incluso cuando – ¡especialmente! – lo que tienes que decir puede verse como una mala noticia o impopular. Eres un experto en tu área, y el mejor medio que tienes para transmitir tu punto de vista es tu propia voz. Úsala con convicción.
EVITA: Disculparte o dudar de ti mismo.
No te arrepientas de decir la verdad (aunque dila diplomáticamente). Curiosamente, cuanto más seguro parezcas estar y mejor defiendas tus afirmaciones, más fácilmente otros aceptarán tu posición sin usarla en tu contra, incluso si no les gusta lo que les dijiste. Tu convicción infunde confianza y respeto y, a su vez, reforzará tus propios sentimientos de pertenencia en la mesa.
SÍ: Usa la posición de tu cuerpo para transmitir confianza.
Incluso cuando no te sientas seguro, recuerda colocarte en posiciones que muestren aplomo y presencia. Es un truco divertido del cerebro, pero no solo te verás más confiado, sino que inclinarte hacia adelante en la conversación en la mesa o pararte derecho con una buena postura en tu escritorio durante las reuniones también puede hacerte sentir más confiado. Se mostrará en tu cara y tu voz, lo que realmente te ayudará a vender tus ideas cuando llegue tu turno de hablar.
EVITA: Encorvarse, hundirse o alejarse de la conversación
Evita siempre posiciones corporales que te hagan parecer desinteresado, ya sea en persona u online. Cuando te ves cansado, derrotado o aburrido, los líderes superiores no te verán tan dispuesto a asumir las tareas que se te ofrecen o asignan. Las personas siempre están observando para ver cómo sus palabras impactan a aquellos con quienes están hablando. Si quieres causar una buena impresión, trata de transmitir interés y entusiasmo, no reticencia.
SÍ: Interactúa antes de que comience la reunión.
Las personas son inherentemente sociales. Siempre recordamos y reaccionamos con más calidez en situaciones laborales con quienes hemos tenido una conversación informal. Aprovecha esos momentos previos al inicio de una reunión para charlar con los que te rodean. Puede sentirse un poco incómodo, pero resiste la tentación de escudarte en tu teléfono. Si la charla trivial no te sale natural, prepara algunas cosas que podrías decir para mantener las cosas en marcha durante 2 a 5 minutos de conversación ociosa.
EVITA: Disminuir la altura de tu silla.
Cuando bajas tu asiento y ya no estás a la altura de los ojos de los demás en la mesa, te estás definiendo a ti mismo como un miembro menor de la discusión. Esto significa que puedes ser ignorado. Incluso si no es tu posición preferida, o si tienes que estirar un poco los pies (dentro de lo razonable), no la ajustes como lo harías con tu silla de oficina. La mayoría de las reuniones no son tan largas como para necesitar tener tu asiento perfectamente configurado para un rendimiento ergonómico.
Siempre es positivo asumir nuevos desafíos y superar tus límites. Cuando estás fuera de tu zona de confort, hablando en voz alta y dando un paso adelante para aprovechar mejor las nuevas oportunidades, puede ser tentador evitar destacar y quedarse en los márgenes de la discusión.
Pero a medida que des estos pasos y participes en la autorreflexión, llegarás a conocerte de una manera más profunda que nunca. Eso mejorará tu sentido de claridad y propósito, permitiéndote avanzar por la vida con convicción y resolución. Todos los que te rodean sentirán tu aura de confianza y aspirarán a emularla mientras ellos también se esfuerzan por florecer como líderes.
Por Equipo Espacio Mutuo
Mutual de Seguridad