Todos podemos marchitarnos o volver a florecer: 6 trucos para volver a enamorarnos de la vida

por | Jul 19, 2021 | Vivir Mejor

A medida que aumentan los índices de vacunación alrededor del mundo, también aumenta la esperanza… pero tras un año de trauma, aislamiento y duelo, ¿cuánto tiempo deberá pasar aún hasta que por fin – ¡por fin! – nos sintamos bien? 

Al parecer, la respuesta a esa pregunta está en tus propias manos. Cada vez más investigaciones demuestran cómo unos simples trucos pueden ayudarte a recargar tus baterías emocionales y despertar, una vez más, ese sentimiento de satisfacción, propósito y felicidad que tanto extrañas. 

¿FLORECER O MARCHITARSE?

La comunidad psicológica ha denominado a esta noble combinación de aptitud física, mental y emocional como “florecer”. Claro –exactamente lo contrario a “languidecer”, esa sensación de estancamiento que tantas personas han soportado durante la pandemia. 

“Florecer es lo que la gente busca al fin y al cabo”, dice Tyler J. VanderWeele, profesor y director de epidemiología y bioestadística de Harvard, Estados Unidos. “Es vivir la buena vida. Por lo general, pensamos en florecer como vivir en un estado en el que todos los aspectos de la vida son buenos; en realidad, es una noción que lo abarca todo”, explica. 

Si crees que la idea de “humanos que florecen” suena demasiado abstracta, no te preocupes: su evidencia científica es sólida y numerosos estudios muestran que actividades sencillas pueden conducir a una marcada mejora del bienestar general. 

¿No sabes cómo comenzar? Descubre cómo evitar marchitarte con los siguientes trucos prácticos – respaldados por la ciencia, claro. 

  • EVALÚA TU ESTADO

Primero lo primero. ¿Cómo saber si estás languideciendo, floreciendo o algún punto intermedio? Pues, preguntarse a sí mismo es una herramienta de diagnóstico eficaz, dice Laurie Santos, profesora de psicología en la universidad de Yale, Estados Unidos.  

Cuando te despiertas, ¿estás listo para comenzar el día o preferirías volver a dormirte? ¿Tienes un sentido de propósito o sientes que gran parte de tu día no tiene sentido? “Eres una especie de experto en tu propio sentido de florecimiento”, señaló Santos. 

El Dr. VanderWeele utiliza una evaluación de 10 preguntas en su programa en Harvard, que puedes probar aquí. Los participantes califican 5 áreas de sus vidas en una escala del 1 al 10, con un cuestionario que se centra en la felicidad y la satisfacción, la salud física y mental, significado de la vida y propósito, carácter y virtud, y relaciones sociales cercanas. El simple hecho de realizar la evaluación y reflexionar sobre las preguntas que formula puede encaminarte hacia los cambios positivos que necesitas.

  • SABOREA Y CELEBRA LAS COSAS PEQUEÑAS

Después de un año de cumpleaños por Zoom y fiestas virtuales, muchos de nosotros queremos deleitarnos al reunirnos nuevamente. Las celebraciones ayudan a crear y cimentar relaciones. “Es realmente importante que, después de la pandemia, celebremos más y más”, dice el Dr. VanderWeele.

Pero no son sólo las grandes ocasiones las que deben marcarse: reconocer los pequeños momentos también es importante para el bienestar, según muestran las investigaciones. Los psicólogos lo llaman «saborear»se trata de apreciar un evento o actividad en el momento, compartir pequeñas victorias y notar las cosas buenas a tu alrededor.

Un estudio de 2012 de estudiantes universitarios descubrió que participar en una actividad para “saborear”, llamada “fotografía consciente”, resultó en mejoras en el estado de ánimo y un sentido significativamente mayor de aprecio por la vida universitaria. A los estudiantes se les indicó que tomaran al menos 5 fotos de su vida cotidiana -de sus amigos, su vista favorita en el campus, los libros que disfrutaron- 2 veces a la semana durante 2 semanas. Reflexionar sobre las fotos, y sobre esos pequeños momentos que les trajeron alegría, ayudaron a los estudiantes a enfocarse en lo bueno de sus vidas.

Si tomar fotos de tus cosas favoritas parece demasiado trabajo (aunque considerando que tienes un cámara excelente ahí mismo, en tu bolsillo, no creo que sea el caso…), la investigación muestra que también es beneficioso disfrutar de las experiencias agradables, como disfrutar de un baño caliente, pasar el día con tu mejor amigo o dar un paseo asombroso.

  • PRACTICA LA GRATITUD

Algunas personas expresaron más gratitud durante la pandemia, ya sea aplaudiendo a los trabajadores y trabajadoras de la salud o agradeciendo a los cajeros y cajeras de los supermercados. 

Pero crear un ritual de gratitud semanal puede cimentar el hábito –y te conviene: numerosos estudios han demostrado que tomarse el tiempo para reflexionar acerca de aquellas cosas de las que estamos agradecidos mejora la calidad de vida. 

En un estudio de 2003, los investigadores instruyeron a los estudiantes universitarios a enumerar, una vez a la semana, 5 cosas por las que estaban agradecidos, tanto grandes como pequeñas. Algunos escribieron que estaban agradecidos de despertarse esa mañana, mientras otra persona incluyó un agradecimiento a los Rolling Stones… Comparado con el grupo de control, los estudiantes asignados al ejercicio de gratitud mantuvieron mejores sentimientos -y menos quejas físicas- en su día a día.

La práctica de la gratitud no debería ser una carga. Intenta añadir el nuevo hábito de la gratitud a un ritual semanal que ya posees en tu rutina, como el almuerzo familiar de los domingos, sacar la basura o ir a comprar al supermercado. Mientras estés realizando esas actividades, da el paso extra y pregúntate a ti mismo: ¿De qué estoy agradecido esta semana?

  • HAZ 5 BUENAS ACCIONES

Los actos de bondad no sólo ayudan al resto, sino que también te hacen florecer a ti. Los estudios indican que realizar 5 actos de amabilidad en un solo día, una vez a la semana, puede tener un efecto poderoso. 

Una investigación de 2004 demostró que cuando estudiantes universitarios pasaban un día realizando 5 actos de bondad -tales como donar sangre, ayudar a un amigo en su trabajo o escribir una nota de agradecimiento a un profesor-, experimentaban un importante aumento en su bienestar… mucho mayor que aquellos estudiantes que realizaban los 5 actos de bondad pero a lo largo de toda la semana. 

El trabajo voluntario también puede mejorar el bienestar. El Dr. VanderWeele y otros investigadores revisaron la data de más de 13.000 adultos, y encontraron que aquellos participantes que se ofrecían voluntariamente al menos 2 horas a la semana durante el período de estudio experimentaban niveles más altos de felicidad, optimismo y propósito, especialmente comparados con aquellos que no hacían voluntariado de nada. 

Para hacerlo más sencillo, la Dr. Grant recomienda comenzar con “un favor diario de 5 minutos”: presentar a 2 personas que podrían beneficiarse mutuamente, o compartir un artículo o una canción a un amigo, demostrándole que estás pensando en ellos. 

  • BUSCA COMUNIDADES Y CONEXIÓN

Incluso una corta charla con un extraño o un vínculo momentáneo con alguien nuevo puede albergar un sentimiento de satisfacción especial, sobre todo cuando ocurre lo que los investigadores llaman “una conexión de alta calidad”. “No tienen que ser relaciones duraderas ni interacciones largas”, dice la Dr. Grant. “A veces, la gente siente un pinchazo de alegría cuando hablan con un desconocido en el metro o la micro, o cuando alguien los saluda en algún restaurante”, explica. 

Momentos de encuentro con otras personas, así como también ser recibido por respeto e incluso entusiasmo, puede energizar y vitalizarnos, ayudando a formar vínculos en nuestro vecindario o comunidad. 

A medida que emerjas de la vida pandémica, intenta reconectar con la comunidad que más extrañas. Quizás signifique volver a una liga de fútbol o a tus clases de yoga, o simplemente volver a pasar el rato en tu cafetería favorita. ¡No temas conversar con extraños!  

  • ENCUENTRA PROPÓSITO EN TUS RUTINAS DIARIAS

¿Qué cosas esperas de cada día? ¿Qué le da sentido a tu vida? La investigación a demostrado que florecer viene de las rutinas diarias, como practicar una habilidad nueva o acercarte a las personas que te importan para agradecerles lo que hacen por ti. Es decir, pequeños momentos de conexión y significado. 

“Existen muchos adultos que cumplirían con los requisitos para sentirse felices, pero no tienen un sentido de propósito”, señala Corey Keyes, profesor de sociología en la Universidad de Emory, Estados Unidos. “Sentirse bien acerca de la vida no es suficiente”.

Si bien el trabajo no tiene por qué ser la razón detrás de tu propósito, los estudios muestran que la forma en la que piensas sobre tu trabajo puede aumentar tu sentido de satisfacción. Profundizar el vínculo con tus colegas y recordarte a ti mismo cómo tu labor contribuye a un bien mayor puede cambiar la forma en la que miras tu jornada laboral. 

Y no –no es necesario que subas a la cima de una montaña o ganes oro en las Olimpiadas. Encontrar un propósito no representa una experiencia épica; mejor, escoge un proyecto pequeño. Puede ser tan simple como limpiar la cocina, lavar las sábanas o meditar por no más de 10 minutos. Completar una tarea simple y concreta puede construir poco a poco tu sentido de realización. 

  • PRUEBA ALGO NUEVO

Para florecer, no es necesario cambiar tus circunstancias de manera radical –lo que los estudios demuestran es que florecer proviene, simplemente, de un set diferente de hábitos y conductas. 

Y, ahora que la vida está poco a poco volviendo a la normalidad, existen más oportunidades para expandirse. Puedes unirte a un club de lectura o de deporte, tomar una clase de cerámica, visitar un museo que tenga abiertas sus puertas, cocinar una receta nueva o aprender un idioma nuevo desde tu celular, con aplicaciones móviles como Duolingo. 

Lo más importante para el bienestar general es, sin duda, tener interés por la vida – el sentimiento de satisfacción y felicidad tiende a venir después de eso. La pandemia ha sido desafiante porque no nos ha permitido continuar con nuestros intereses previos, por lo que, quizás, éste sea el momento perfecto para buscar pasatiempos nuevos. 

El fin de la pandemia es también un momento ideal para reflexionar y preguntarte a ti mismo: ¿Cómo deseo pasar mi tiempo?

Por Equipo Espacio Mutuo

Mutual de Seguridad

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