Cómo irse de vacaciones… sin salir de casa

por | Nov 2, 2020 | Vivir Mejor

“Necesito vacaciones”. 

¿Cuántas veces al día se te cruza esa frase por la mente? El sentimiento no es nuevo, ni único. La incertidumbre de la pandemia y la economía global, así como el agotamiento causado por la cambiante realidad laboral, tienen a todo el mundo en busca de un escape

Sí, las vacaciones son necesarias para tu salud física y mental. Los hombres que no toman vacaciones anuales tienen un 32% más de probabilidades de tener un ataque cardíaco fatal respecto de aquellos que sí se toman un descanso; y las mujeres que rara vez se toman vacaciones -una vez cada 6 años o menos- son 8 veces más propensas a desarrollar enfermedades al corazón. 

Sin embargo, una cosa es saber que deberías tomarte unas vacaciones y otra muy diferente es, efectivamente, poder tomarlas. En medio de la crisis sanitaria actual, incluso una visita al supermercado está llena de riesgos y restricciones. Un viaje hoy son palabras mayores. 

Con un poco de creatividad y buena voluntad, unas vacaciones en casa pueden ofrecer algunos de los beneficios buscados: una oportunidad de descansar, un quiebre en la rutina y renovadas instancias de libertad y diversión.

1. LEE LIBROS Y VE PELÍCULAS QUE TE TRANSPORTEN

Al momento de viajar a un lugar desconocido, muchas personas utilizan el cine y la literatura para familiarizarse con la cultura. En estas vacaciones en casa no hay razón para no hacer lo mismo: selecciona películas o libros conocidos -y no tan conocidos- que ilustren los lugares a los que te mueres por viajar. Busca directores locales y autores nativos que te hagan sentir parte de la zona, y piérdete en sus perspectivas. 

Ya sea Europa, una isla tropical o los rascacielos de Nueva York, existen numerosas obras artísticas que podrán satisfacer -al menos mientras tanto- tus ansias de viajar. ¿Y cuando finalmente lo hagas? Pues bien, todo ese conocimiento histórico y cultural acumulado habrá sido útil para que la experiencia sea mucho más emocionante, como un sueño hecho realidad. 

2. AMPLÍA TUS HORIZONTES MUSICALES

La música está profundamente conectada con nuestras emociones, por lo que tiene una poderosa capacidad transportadora. Los Ukeleles y la música Hula te llevarán la playa hawaiana a tu hogar, por ejemplo, así como también el Reggae y la Salsa son capaces de soltar hasta el más temible de los nudos en tu espalda. 

Intenta construir una lista de reproducción que incluya artistas y géneros musicales del destino que deseas, para así crear un ambiente similar. En ciertas aplicaciones, como Spotify, quizás encuentres listas ya hechas, capaces de llevarte a cualquier lugar del mundo. 

3. PREPARA EL APERITIVO ADECUADO

La hora del cóctel a menudo se anuncia como un momento para escapar de la realidad. Ya sea que hayas tenido que cancelar un viaje o simplemente estés soñando despierto, un poco de investigación puede ayudarte a convertir este ritual cotidiano en un momento de alegría y diversión.

Si Francia está en tu agenda de vacaciones futuras, consigue una botella de champaña y bébela en tus mejores copas. Si Italia es el plan, intenta hacer su propio Amaro o busca en internet dónde comprar sodas italianas amargas. Si tu sueño es conocer Estados Unidos, busca cervezas artesanales que puedas encontrar en nuestro país, y deléitate con la variedad. 

Tu elección tampoco tiene que ser alcohólica: revisa esta lista con 100 bebidas no alcohólicas que se saborean alrededor del mundo, y deja correr tu imaginación. ¿Qué te apetece?

4. TOMA UNA AVENTURA CULINARIA

Viajar expande los horizontes… y el paladar. Si se te antojan nuevas aventuras culinarias, regálate a ti mismo un libro de cocina, con recetas que te permitan explorar tierras muy, muy lejanas. Si necesitas encontrar ingredientes especiales, una rápida búsqueda en internet puede ayudarte a abastecer tu despensa con especias y condimentos nuevos. 

¡Tus gustos no tienen por qué ser exóticos! Puedes elegir un clásico completo italiano si extrañas los bares y la calle, algodón de azúcar si echas de menos los parques o pescado si te hace falta una visita a la costa. Define lo que se te antoja y descubre a dónde te lleva la comida. 

5. ENCUENTRA UN JUEGO NUEVO

Los juegos de otros países amplían nuestro campo de entretención, revelando nuevas formas de acceder a nuestro niño interior sin importar la edad que tengamos actualmente. Si tienes un destino soñado, busca juegos típicos de la zona o que se hayan inventado en esa parte del mundo, como el Mahjong en China, la Petanca en Francia o el Perudo, que se cree que es un juego Inca traído a España en el siglo XVI.

O, si quieres, puedes hacerlo al revés. ¡Investiga los orígenes de uno de tus juegos favoritos y ve a dónde te lleva!

6. VISITA UN MUSEO (VIRTUAL)

Varios museos han comenzado a reabrir con distanciamiento social y mascarillas obligatorias, pero si aún no estás preparado para asistir en persona, puedes pasar una tarde explorándolos… online. El proyecto “Arts and Culture” de Google ha digitalizado cientos de colecciones y recorridos virtuales, en museos alrededor de todo el mundo. Encuentra el de tu preferencia en este mapa.

Claro, no es lo mismo que ver las obras en persona, pero puedes llegar al museo sin limitaciones de la vida real. ¿Cuándo más podrás visitar el Tate, el Reina Sofía y el Acrópolis en un mismo día? También puedes explorar por artista o tema, construyendo tu propio “museo” personalizado con las mejores colecciones del mundo. 

7. VISITA UN PARQUE NACIONAL

Acampar es un tipo de vacaciones que, en su mayoría, es seguro y accesible en este momento. Pero si no puede acceder al aire libre, pues, que el aire libre venga hacia ti con un recorrido en línea por alguno de los parques nacionales de Estados Unidos: explora un volcán hawaiano, bucea en un naufragio de Florida o monta a caballo por las rocas rojas del Bryce Canyon.

Al igual que las visitas a los museos virtuales, estas no son un verdadero sustituto de las visitas en persona. Pero estas aventuras digitales pueden proporcionarte un cambio de ritmo refrescante y motivador.

8. APRENDE OTRO IDIOMA

“El lenguaje es el hogar de las ideas que no existen en ningún otro lugar”, escribe Robin Wall Kimmerer en el libro “Braiding Sweetgrass”. “Es un prisma a través del cual ver el mundo». Incluso hablar unas pocas palabras en otro idioma puede permitirnos cambiar nuestra perspectiva y sentirnos más conectados a un lugar. Las pronunciaciones deliberadas del islandés se sienten como una pieza con el hermoso e inefable paisaje del país; la musicalidad del hawaiano, idioma con solo 8 consonantes, tiene una dulzura que se siente como el agua que inunda el paisaje; decir algo en italiano, incluso si son sólo las palabras «hola» y «gracias», se siente como una ventana a la buena vida.

Si hay un lugar que te llama por tu nombre, ¿por qué no aprendes algunos de los conceptos básicos del idioma? La aplicación gratuita Duolingo ofrece 35 idiomas diferentes (¡incluido el Klingon, de “El Señor de los Anillos”!).

Ninguna de estas actividades será tan agradable como un día completo en tu destino soñado, pero te garantizamos que será igual de memorable. Viajar nos sacude de nuestra rutina, alivia nuestras preocupaciones de siempre y nos desconecta de los problemas cotidianos. Cocinar un plato exótico o escuchar una canción distinta puede lograr eso mismo: sacarnos de nuestro monótono día a día y recordarnos que, al fin y al cabo, somos nosotros mismos quienes poseemos el poder de nuestra propia felicidad. 

Por Equipo Espacio Mutuo

Mutual de Seguridad

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