¿Sientes que es imposible ser productivo entre reuniones? Tu cerebro entró en “modo espera” y debes aprender a recuperarlo.
Revisas tu calendario y ahí está: una reunión importante, una cita al médico, o cualquier trámite que requiera tu atención. Sea lo que sea, tienes tiempo todavía – el “gran evento” del día es en unas cuantas horas más.
“Qué bien”, piensas tú ingenuamente. “Usaré ese espacio libre de tiempo para ser productivo y avanzar en mis demás tareas, aquellas que sean sencillas y de rápida ejecución”. Pero ya es demasiado tarde: tu cerebro ha activado el “modo espera”, donde no puedes hacer nada más que marinar mentalmente hasta que llegue la hora de tu reunión, cita al médico o trámite.
La espera comienza – el cerebro se dedica a pensar en todas las cosas que podrías estar haciendo mientras tanto, pero sin llegar a hacerlas realmente. ¿Por qué nos sometemos a este extraño tipo de tortura cognitiva? Y, más importante aún: ¿Cómo podemos combatirla?
EL CEREBRO, ¿CÓMODO Y TESTARUDO?
Al cerebro no le gusta cuando las cosas no salen según lo planeado. A menudo tenemos un “escenario ideal” para realizar una tarea y, cuando algo interrumpe esa rutina u horario de siempre, hacemos cortocircuito. Si tienes una reunión a la 4 pm y luego otra a las 5 pm, a menos que intencionalmente planees trabajar en algo entre esas reuniones, tu cerebro puede interpretar cualquier información adicional como un obstáculo que pretende interrumpir su cómoda rutina, la cual le gusta seguir.
El modo de espera del cerebro es una forma de procrastinación que, a veces, incluso puede impulsar la productividad de algunas personas. Personas, por supuesto, que prefieren trabajar a presión, cuando los plazos finales están a punto de cumplirse. “Es muy común que el cerebro entre en un estado de pánico para crear una sensación de urgencia o motivación para completar las tareas”, dice la terapeuta Rachel Holzberg. Sin embargo, la investigación sugiere que procrastinar rara vez ayuda a las personas a terminar las tareas tan bien como podrían si no pospusieran las cosas.
TÚ MANEJAS EL TIEMPO (Y NO AL REVÉS)
La gestión del tiempo es esencial para comprender y combatir el cerebro en modo espera. Según la terapeuta Emily Sterns, sobreestimar la cantidad de tiempo que puede tomar una tarea impedirá que una persona elija trabajar en ella cuando se avecine un evento en su calendario, especialmente si eso significa cambiar y concentrarse en otra cosa.
Al comprender de manera realista cuánto tiempo efectivamente tomará cierta tarea, es posible evitar la angustia de la procrastinación – y evitar que tu cerebro en espera absorba valiosos minutos y horas de tu día.
CÓMO COMBATIR EL CEREBRO EN MODO ESPERA
- Haz una lista de tareas con prioridad.
Enumera las principales tareas que debes realizar hoy día, sin falta. Luego, enumera las tareas que te gustaría completar el día de hoy, incluidos aquellos ítems que deben ser completados a lo largo de la semana y aquellos problemas con los que el Tú del Futuro (es decir, la persona que serás en una semana más) tendrá que lidiar más adelante.
“Si tienes esta lista al comenzar tu día, en el momento en que tu cerebro esté esperando podrás rápidamente reflexionar sobre ella y, con suerte, elegir alguna de las tareas urgentes o agradables para completar”, dice la terapeuta Jennifer Teplin. “Si te preparas para un día de éxito y delineas tus prioridades, tendrás mejores resultados”, asegura.
- Recurre a tus sistemas de apoyo.
“Cuando otros nos mantienen responsables, es más probable que completemos la tarea en cuestión, así que no dudes en comunicarte con un amigo que pueda brindarte el empujón que puedas necesitar», dice Holzberg. “Cuando otras personas no estén disponibles, usa un sistema de recompensas -como ver un capítulo de tu programa favorito- para mantenerte motivado y combatir al cerebro en espera”, recomienda la experta.
- Chequéate a ti mismo.
Cuando te encuentres en la agonía del cerebro en modo espera, aprovecha la oportunidad de chequearte a ti mismo: pregúntate exactamente qué es lo que estás esperando, y descubre el “por qué” detrás de tus momentos de inactividad. Las respuestas podrían reactivarte. “Cuando decimos lo que estamos experimentando y profundizamos un poco más, a menudo descubrimos que lo que se siente como una roca es, en realidad, sólo una piedra”, dice Teplin.
- Deja tiempo libre.
Para aquellas personas que se sienten abrumadas por tareas tanto grandes como pequeñas, dividir su horario en bloques de tiempo puede resultar una bendición. En lugar de, por ejemplo, tener una reunión a las 4 pm y negarse a trabajar hasta entonces, piénsalo así: ahora, tienes un período claro en tu calendario -entre la 3 pm y las 4 pm- para trabajar en una tarea pendiente.
“Estableciendo un calendario semanal con horarios específicos y para responsabilidades específicas sirve para esto”, dice Sterns. “La auto-responsabilidad y la administración del tiempo son esenciales para el éxito en la lucha contra el modo de espera”, explica.
El cerebro es poderoso, pero no dejes que te controle: con decisión, energía y un horario establecido, nada se interpondrá entre tus metas y tú – ni siquiera un cerebro en espera que se niega a trabajar…
Por Equipo Espacio Mutuo
Mutual de Seguridad